Una cama entre cartones

La nueva cama de Maruja y sus hijasCuando llegamos a Cajamarca, lo hacemos siempre con muchas ilusiones, proyectos, planes etc. pero casi siempre surgen necesidades imprevistas  que hay que atender.

Esta vez nos hemos encontrado con Maruja.

Tiene 29 años, no sabe leer ni escribir, su marido la ha abandonado y tiene tres hijas de 6, 4 y 2 años y espera un cuarto bebé para la primera semana de agosto.

Maruja y sus tres hijas Maruja vive en una chabola construida con cartones y maderas en un solar que se utiliza como garaje y que ella vigila  a cambio de poder vivir allí.

Hasta ahora ella y sus tres hijas dormían en una cama desvencijada pero hoy nosotros le hemos llevado una litera que le va a permitir  un descanso mejor.  Sus niñas mayores, Miriam y Xiomara saltaban nerviosas cuando nos vieron llegar con la litera, las mantas, las sábanas etc. y a pesar de ser las seis de la tarde, las dos decían que tenían mucho sueño y le pedían permiso a su mamá para irse a dormir.

 

Maruja está feliz. Para ella, esto que no es más que un remiendo a su situación, supone un gran cambio pues como ella misma nos decía esta tarde, nadie se había preocupado nunca por ella.

Nos gustaría proporcionarle a Maruja y a sus niñas una vivienda digna. De momento no es posible pero nosotros tenemos la esperanza de poder conseguirlo en un futuro próximo.