Descripción del Producto
Muchas niñas de los Andes tienen dificultades para acabar sus estudios al terminar la primaria. Con 12 años empiezan a trabajar en el campo, cuidando ganado y, a veces, en el servicio doméstico en la ciudad.
Abandonar los estudios a edad tan temprana les impide, en muchos casos, llevar una vida digna y las condena frecuentemente a situaciones de pobreza y marginación.