Alcanzando las metas con aguja e hilo

Ayer estuve con las chicas de nuestro taller de corte y confección que como sabéis es financiado por la Parroquia de San Esteban de Noalla.  Este año hay quince alumnas matriculadas y el perfil ha cambiado.

Hasta ahora teníamos sobre todo jóvenes que habían acabado la Primaria y no podían realizar otros estudios. Este año, la mayoría de las chicas que se han matriculado son también  jóvenes pero casi todas están ya casadas o son madres.

Todas están muy agradecidas por tener la oportunidad de formarse como modistas y de poder hacerlo de manera gratuita ya que de otra forma no sería posible para ellas pues su condición económica no se lo permite.  Nuestro taller depende directamente del CETPRO (Centro de Educación Técnico Productiva) por lo que todas nuestras alumnas tienen un certificado oficial cuando finalizan sus estudios  y por tanto pueden trabajar como empleadas o poner su propio taller que es a lo que aspiran la mayoría de ellas.

Todas las alumnas de los años anteriores están trabajando e incluso una ha puesto su propio taller.  Nosotros podemos estar satisfechos ya que nuestro objetivo principal, que es mejorar la condición de vida de estas jóvenes y sus familias, está cumplido y además hemos conseguido que ellas se sientan importantes y capaces de lograr lo que se proponen.

[slideshow]

Ahora seguiremos ilusionados apoyando a las que están formándose actualmente y seguro que  ellas también conseguirán salir adelante.

Os dejamos la carta de una de nuestras alumnas. Esperamos que os guste.